El director de la Axencia Galega de Innovación, Manuel Varela Rey, ha presentado la segunda convocatoria del programa Conecta Peme, dotado con 8 millones de euros para tratar de movilizar unos 15, con el fin de promover los proyectos de innovación presentados por varias pequeñas y medianas empresas (pymes, pemes en gallego) en consorcio.

Varela Rey ha destacado el éxito de la primera convocatoria, iniciada en septiembre del pasado año, y ha señalado que el interés mostrado por las pymes gallegas y la demanda de las ayudas ha llevado al Gobierno gallego a reeditarlas en un periodo de cuatro meses. Entre las dos convocatorias son casi 22 millones de euros en ayudas para tratar de movilizar unos 40 en total.

Se trata de ayudas a fondo perdido, con el objetivo de promover la colaboración entre empresas para innovar tanto en productos como en procesos, así como la cooperación con centros tecnológicos o de conocimiento gallegos. Uno de los requisitos es contratar a uno de estos centros dentro del proyecto y destinar a esta parte al menos el 15% del presupuesto.

De este modo, ha defendido Varela Rey, las pymes gallegas acceden al conocimiento que se produce en estos centros investigadores y éstos se orientan a las necesidades del tejido productivo gallego. El objetivo es aumentar la competivividad.

Esta línea de ayudas será recurrente y las convocatorias dependerán de la demanda de las empresas y de la disponibilidad presupuestaria, ha apuntado el director de la Axencia de Innovación, que ha asegurado que la iniciativa ha llegado "para quedarse", a juzgar por el interés generado.
La primera convocatoria se ha resuelto con la concesión de ayudas para 30 proyectos consorciados, en los que participan más de 100 empresas. Destacan las iniciativas en el ámbito del medio rural y de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

Para esta segunda edición, ha asegurado, ya han recibido llamadas de pymes interesadas, lo que ha animado al Gobierno gallego a abrir ya el proceso. Las solicitudes se podrán presentar desde este martes y hasta el 14 de febrero y se resolverán en el segundo trimestre de 2014. La tramitación será por vía exclusivamente telemática.

En las iniciativas deberán participar un mínimo de tres y un máximo de seis pymes y al menos un centro tecnológico o de investigación. El presupuesto debe ser de 600.000 euros o más, lo que permite que se presenten proyectos "con masa crítica suficiente para tener impacto en el mercado".

En cualquier caso, la participación de cada empresa debe ser equilibrada y ninguna podrá superar el 65%. El mínimo para formar parte es de 75.000 euros, una cantidad "asequible" para planes que se plantean para año y medio, ha dicho Varela.

Para los casos de investigación industrial, las ayudas cubrirán hasta el 60% para las pequeñas empresas y hasta el 50% para las medianas. Cuando se trate de iniciativas de desarrollo experimental, el porcentaje sube hasta el 80% en las pequeñas empresas y hasta el 75% en las medianas.

Las subvenciones cubren gastos como los de personal investigador, amortización o adquisición de nuevo equipamiento industrial o costes de patentes. Es incompatible con otro tipo de ayudas para este mismo fin, pero esta convocatoria concede el máximo de ayudas que permite la Unión Europea.

Entre los criterios que se tendrán en cuenta están el impacto socioeconómico que se prevé que tenga la iniciativa, la agrupación de empresas que "sumen entre ellas", la posibilidad de internacionalización de los resultados o la capacidad para llevar adelante el proyecto.